La llamada entre Donald Trump y Vladimir Putin para negociar un cese del fuego en Ucrania comenzó a las 10 de la mañana de Washington y duró casi dos horas.
“La conversación ha terminado”, dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, a la agencia estatal de noticias TASS. En la misma abordaron un proyecto de tregua en Ucrania.
El vicejefe de Gabinete de la Casa Blanca, Dan Scavino, había detallado que la conversación empezó a las 10 (hora de Washington), en el Salón Oval. “La llamada va bien y sigue en curso”, señaló una hora después en su cuenta de la red social X (exTwitter).
Se trata de la segunda llamada que mantienen los líderes de Estados Unidos y Rusia desde que Trump volvió a la Casa Blanca, tras la conversación que mantuvieron el pasado 12 de febrero.
Sin embargo, este llamado es diferente al anterior debido a que es la primera comunicación luego de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aceptó negociar un alto al fuego, bajo presión de Estados Unidos.
El presidente estadounidense congeló la ayuda militar y de inteligencia a Ucrania, y Zelenski finalmente negociar un alto el fuego con Rusia y firmar un acuerdo sobre la explotación de minerales estratégicos con Estados Unidos.
En la previa, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, decidió no dar detalles sobre los temas que se iban a discutir en la llamada: “El contenido de las conversaciones entre dos presidentes no está sujeto a ninguna discusión previa”.
Mientras que el mandatario estadounidense adelantó que iba a hablar con su par ruso sobre “tierras”, “centrales eléctricas” y “dividir ciertos activos”.
Trump pareció referirse a la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, que está bajo control ruso desde 2022 y que desde que comenzó la invasión está atrapada en el fuego cruzado de forma reiterada.
El Organismo Internacional de Energía Atómica de la ONU ha expresado varias veces su alarma ante los temores de una posible catástrofe nuclear en la planta.
Las conversaciones sobre el fin de la guerra se han acelerado en las últimas semanas, mientras el líder de la Casa Blanca quiere cumplir con su promesa de campaña de frenar la guerra inmediatamente.
Rusia hasta ahora no ha mostrado señales de aceptar ese acuerdo ni de avanzar en un cese del fuego. No quiere ceder los territorios que ha capturado desde la invasión y rechaza el ingreso de Ucrania a la OTAN. Además, aceleró sus ataques contra Ucrania y los dos países mantuvieron intensos combates aéreos durante el fin de semana.