Sobre la reparación laparoscópica de atresia duodenal, el doctor Ricardo Soria, integrante del equipo de cirugía pediátrica neonatal de la Maternidad, contó: “Realizamos un procedimiento que viene a coronar un largo camino que venimos realizando con distintos equipos que trabajan de manera interdisciplinaria. El equipo de medicina fetal y pre natal identificó a una paciente embarazada de un bebé con atresia de duodeno, al ver que tenía dilatada la cámara gástrica y el duodeno, nos permitió preparar los materiales, los tiempos y los recursos para recibirlo”.
Al mismo tiempo que agregó: “El nacimiento se estabilizó gracias al equipo de la neonatología y el aporte de los cardiólogos; identificamos que era factible realizar un procedimiento novedoso que era la reparación de una atresia duodenal con la tecnología laparoscópica, llegamos a esta situación gracias a que la institución hizo una inversión en materiales, incorporó recurso humano capacitado, como ser al doctor Omar Baldo, quien es instructor en laparoscopía y está integrado al equipo de cirugía neonatal itinerante”.
Asimismo, el especialista destacó que a las 24 horas de nacido el bebé (que además padece síndrome de Down), lograron hacer la reparación laparoscópica de una atresia de duodeno que en este caso estaba ocluido por interposición del páncreas, lo que se llama comúnmente páncreas anular (es un aro o collar anormal de tejido pancreático que rodea al duodeno, la parte del intestino delgado que se conecta al estómago).
“La cirugía salió muy bien, tardó aproximadamente una hora y media, el equipo de anestesia estuvo a la altura de las circunstancias y la doctora Sofía Morales fue quien hizo posible el intra operatorio. La recuperación fue como las habituales, sin ninguna eventualidad, a los cinco días comenzó a comer y hoy, ya promediando las dos semanas próximo al alta, junto al equipo de neonatología y enfermería estamos cuidando a este bebé y quisimos dar a conocer a la población que ya está disponible en el ámbito público una prestación”, explicó Soria.
Cabe destacar que este tipo de intervenciones son no convencionales, de excelencia, exclusivas y requirió de un equipo de trabajo que busca estar a la vanguardia de manera responsable. “Todo esto fue posible gracias a la ambición y al aporte estructural que nos dio el hospital en cuanto a espacio físico, instrumental e incorporación de gente capacitada. Para realizar estas prácticas lo primero que hacemos es un entrenamiento de simulación, hay hospitales de referencia y centros que brindan el titulo primero en lo que es básico, luego en lo avanzado y neonatal. Estamos todos avalados por esa práctica, luego adentro del hospital se hizo una inversión en simulación, es decir que una vez acreditados seguimos capacitándonos y posterior a esto fue la incorporación la práctica”, cerró.
