Directivos de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) comunicaron este miércoles la decisión de adoptar “medidas extremas no deseadas” para afrontar la crisis del sector. Entre ellas, la reducción del servicio de colectivos en un 25% y la suspensión progresiva y temporal del personal.
Daniel Orell, directivo de la entidad, recordó en rueda de prensa que los ingresos de las firmas prestatarias “son fijados por el poder concedente, y no por las empresas, por lo que estamos atados a una decisión política”.
Somos una actividad que está totalmente regulada y que parecería, por lo que se aprecia en los últimos tiempos, solamente tenemos obligaciones, no tenemos ningún derecho”, planteó el representante de Aetat.
Además, enfatizó que “la situación del transporte público de pasajeros es de quebranto, no hay otra palabra para definirla”.
Tras una reunión entre los directivos, se dio lectura a un comunicado de prensa para expresar que se ha llegado “a un punto de inflexión”.
En ese marco, anunciaron que, “ante la imperiosa urgencia y necesidad de mantener el servicio público y las fuentes de trabajo”, se vieron en “la obligación” de tomar una serie de medidas.