Helado o yogurt helado, he ahí el dilema para los amantes de los postres fríos durante el verano, ya que estas dos opciones suelen ser las más populares en la temporada de calor.
Desde finales de la década de los 70, el yogurt helado o frozen yogurt ha ido ganando terreno en el mercado de los postres fríos hasta convertirse en la competencia directa del helado, debido sobre todo a que es considerada una alternativa más saludable. Sólo en Estados Unidos, se venden aproximadamente 121 millones de porciones de yogurt helado cada año desde el 2020.
Sin embargo, para determinar si el yogurt helado puede formar parte de una alimentación saludable, es necesario realizar una comparación entre los ingredientes de cada uno.
Helado y yogurt helado
El helado posee una textura cremosa y suave y está compuesto de una mezcla de ingredientes lácteos, como leche entera y descremada, e ingredientes adicionales para endulzar y dar sabor, como frutas, nueces y chispas de chocolate.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), el helado debe contener al menos un 10% de grasa láctea.
El yogurt helado se compone de sólidos lácteos, edulcorante, grasa láctea, cultivo de yogurt (usualmente Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus), además de saborizantes y, a veces, colorantes naturales o artificiales. Además, como indica una investigación publicada en Journal of Dairy Science, revista oficial de la Asociación Americana de Lácteos (ASDA), el yogurt helado contiene no más del 10% de grasas lácteas y un porcentaje mínimo de ácido láctico que apenas alcanza el 0.3%.
El yogurt helado y el helado son postres con una apariencia similar, ambos tienen una textura cremosa y suave, pero el primero se caracteriza por tener el sabor ácido y picante del yogurt combinado con la frialdad del helado.
Obviamente, estos son lineamientos generales y pueden variar en productos específicos bajos en grasas o con otras características al momento de elaboración.
¿Cuál es el postre más saludable?
De acuerdo al Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), si se compara una porción de media taza (72 gramos) de yogurt helado de vainilla y una porción con la misma cantidad de helado de vainilla, este último suele contener más calorías y grasa.
Sin embargo, en esta misma comparativa, el yogurt helado de vainilla tiene más azúcares añadidos.
Por otro lado, el helado lleva la delantera en contenido de vitamina B12, una vitamina esencial que ayuda al cuerpo a producir energía y favorece la salud del cerebro y el sistema nervioso. En cuanto al calcio, cada uno aportan cantidades similares de este mineral, que es beneficioso para el fortalecimiento óseo.
Al profundizar en el perfil nutricional, en lo que respecta a proteínas y carbohidratos, ambos mantienen niveles parecidos. Aunque, cabe señalar que algunos tipos de yogurt helado podrían ofrecer más proteínas, en particular aquellos elaborados a partir de yogurt griego.
Estas diferencias hacen que el yogurt helado pueda ser una opción preferente para aquellos que desean mantener una alimentación saludable con menos consumo de calorías y grasa de las que ofrece el helado tradicional.
La nutricionista Yendi Caraballo Lopez destaca otra diferencia entre el helado y el yogurt helado: “algunas marcas de yogurt helado incluyen probióticos, que no se encuentran comúnmente en el helado. Los probióticos son microorganismos vivos que ayudan a mantener un equilibrio saludable de las bacterias intestinales, contribuyen en la defensa del cuerpo contra patógenos dañinos, favorecen la digestión de la lactosa y reducen la inflamación intestinal causada por algunos trastornos gastrointestinales”, según señaló la especialista de La Florida, EEUU, en una nota en EatingWell.
Un error común es creer que todas las variedades de yogurt helado incluyen probióticos, pero esto no es necesariamente cierto por eso es importante revisar la etiqueta del producto para ver los detalles de su contenido.
Tal como señala un estudio publicado en National Library of Medicine, la biblioteca biomédica más grande del mundo, hay que tener en cuenta que el contenido nutricional del helado y el yogurt helado se modifica cuando se agregan elementos como chocolate, caramelo, nueces, grageas y dulces. Estos agregados aumentan la ingesta de azúcar, grasas totales y grasas saturadas.
En conclusión, si hablamos de alimentación saludable durante el verano la elección entre helado y yogurt helado puede verse influenciada por las diferencias en el contenido de grasas, azúcares añadidos y probióticos que tiene cada uno de esos postres. El helado regular contiene más grasa, mientras que el yogurt helado suele tener mayores cantidades de azúcares añadidos. Por lo tanto, cada uno debe ser consciente de su ingesta de grasas y azúcares añadidos al escoger entre estas dos opciones, según los objetivos de salud que tenga.