Por lo general, los pechos atraviesan transformaciones a largo de la vida de una mujer, como en la etapa de la pubertad o cuando se inicia la maternidad. En ocasiones, estas diferencias en el tono de la aureola (área circular de la piel que rodea el pezón) son normales o benignas.

“El oscurecimiento del pezón es un proceso común que a menudo está vinculado a cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo, la menstruación o el uso de anticonceptivos hormonales. Durante el embarazo, por ejemplo, el aumento de la producción de melanina, el pigmento responsable del color de la piel, es una respuesta natural del cuerpo a las alteraciones hormonales, especialmente a los niveles elevados de estrógeno y progesterona”, explica la Dra. Marta López, ginecóloga del Hospital Clínico San Carlos en Madrid.

“Además”, continúa la Dra. López, “otras causas del oscurecimiento del pezón pueden incluir el envejecimiento, la exposición al sol sin protección y ciertas condiciones médicas como la hiperplasia adrenal congénita o el síndrome de Cushing, que también afectan los niveles hormonales en el cuerpo”.

Sin embargo, existen algunos signos en los que el color en los pezones femeninos puede determinar ciertas complicaciones en la salud. Por ello, conocer cuáles son los motivos de estos cambios es importante para realizar a tiempo un chequeo médico.

Cambios en los pezones y en la piel de las mamas
Pubertad. En esta fase del desarrollo humano, se aumentan los niveles de estrógeno. Para una mujer, esto genera que los senos crezcan, además del oscurecimiento de la aureola.
Menstruación. Durante la ovulación, los médicos indican que una mujer puede percibir en los senos dolor, hinchazón, mayor sensibilidad, entre otros pequeños cambios que incluyen el oscurecimiento del pezón.
Anticonceptivos orales. Las píldoras que previenen el embarazo contienen versiones sintéticas de estrógeno y progesterona, lo que produce alteraciones hormonales en el cuerpo de una mujer, entre ellas el cambio de color del pezón.
Gestación y lactancia materna. Con el fin de producir leche para alimentar al bebé, el cuerpo genera estrógeno y progesterona adicionales. La aureola también se oscurece para que el bebé reconozca su fuente de alimentación.
Vello cerca de la aureola. Si es de color negro y crece alrededor del pezón, puede provocar oscurecimiento de la aureola.
Enfermedad de Paget. Este tipo de cáncer afecta a la piel del pezón provocando un oscurecimiento de la aureola, además de picazón, enrojecimiento, costras alrededor, pezón aplanado, secreción amarillenta o sanguinolenta.
Diabetes. En el caso de las aureolas, no solo cambian de color, sino que también presentan signos de descamaciones y heridas anormales.
En resumen, la pigmentación del pezón es un reflejo de los cambios internos del cuerpo, en particular de las fluctuaciones hormonales, y generalmente no es motivo de preocupación. Sin embargo, si el oscurecimiento se acompaña de otros síntomas inusuales, como dolor o secreción, es importante consultar a un especialista para descartar cualquier condición subyacente.