El pasado domingo 26 de enero, en el Centro de Salud de San Miguel de Tucumán se produjo un sorprendente robo, luego de que un paciente que se encontraba internado en la sala de Traumatología, robara tres monitores del área de Oncología del nosocomio, a pesar de tener un yeso en una de sus piernas y movilizarse con muletas.

El hecho ocurrió a las 03:26 horas aproximadamente. El ahora imputado, se dirigió desde allí a pie hasta la sala de Oncología del hospital. “Una vez en el interior, se apropió de tres monitores de computadora con sus bases y fuentes de alimentación, respectivamente. A continuación, se retiró del sector y regresó a su habitación con los elementos ajenos a su propiedad. Ese mismo día, a las 14:00 horas, en su lugar de internación fue descubierto por el personal del Hospital en posesión de dos monitores (el tercero había sido entregado a un familiar)”, señalaron desde el Ministerio Público Fiscal.

Este miércoles se llevó a cabo el juicio abreviado por esta causa, donde la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos I, a cargo de Diego López Ávila, consideró que las pruebas (entre ellas el material fílmico) eran suficientes para llegar a este convenio pleno cuya pena es de un año y dos meses de prisión de ejecución condicional.

Además, la Justicia determinó que el condenado deberá someterse al cumplimiento de reglas de conductas, entre las cuales se destaca la prohibición de acercamiento a la institución afectada y tratamiento psicológico (dijo tener problemas de consumo).

“Por expresas instrucciones del titular, la auxiliar de fiscal, Fernanda Antoni Piossek, fue la encargada de oralizar el acuerdo donde se le acumuló otro legajo (resistencia a la autoridad -hecho ocurrido el 9 de febrero de 2023-). Para finalizar, la jueza actuante hizo lugar al acuerdo que contó con la conformidad de las partes”, informaron desde el Ministerio público Fiscal.