El Ministerio Fiscal le formuló cargos contra el cuarto sujeto atrapado en el marco de la investigación por un robo en un edificio de Barrio Norte. Fue detenido en Las Talitas. Sus cómplices ya se encuentran procesados y detenidos.
El caso es investigado por la Unidad Fiscal Especializada en Robos y Hurtos IV, a cargo de Diego Sebastián Hevia, quien fue representado por la auxiliar de fiscal Natalia Carabajal en la audiencia solicitada por el Ministerio Fiscal con el objeto de convalidar la detención, formalizar la investigación y solicitar medidas de coerción de máxima intensidad. La investigadora del MPF formuló cargos en contra de un sujeto apodado “Pelao”, por el delito calificado como robo agravado doblemente por ser cometido en banda y por efracción, requiriendo en contra del mismo la prisión preventiva por el plazo de 90 días ante la existencia de los peligros procesales de riesgo de fuga y de entorpecimiento de la investigación y para avanzar en las principales medidas.
“No fue un hecho cometido al azar, fue perpetrado en la nocturnidad, con violencia y con superioridad numérica. Los acusados ingresando al departamento por un ascensor privado, dando cuenta que hubo un trabajo de inteligencia previo y usando una violencia desmedida en contra de las víctimas”, remarcó la auxiliar de fiscal Carabajal.
La jueza interviniente resolvió hacer lugar a todas las solicitudes formuladas por la acusación pública durante la audiencia multipropósito desarrollada este viernes 4 de abril.
El hecho
El día 19 de enero de 2025, aproximadamente a las 03.20 horas, fue que los acusados, en forma conjunta y coordinada, quienes se movilizaban en un automóvil Fiat Palio color rojo, con claras intenciones de apoderarse de elementos ajenos, se hicieron presentes en el edificio sito en calle 25 de Mayo al 700 de San Miguel de Tucumán. Una vez allí, luego de varios intentos de probar diferentes llaves, lograron abrir la puerta de acceso. A continuación, subieron por el ascensor que conecta en forma privada con el departamento, y previo a forzar la puerta, ingresaron al interior del mismo. Luego, ataron de manos a las víctimas y se apoderaron ilegítimamente de U$S 1.000, $ 40.000, cuatro relojes, dos teléfonos celulares, una valija, dos bolsos, cinco lentes fotográficos, bebidas, ropas varías, una cámara fotográfica, un morral, un cuchillo artesanal, un GPS y un binocular, dándose a la fuga del lugar con los elementos desapoderado