Un incendio forestal en la zona de Yerba Buena encendió las alarmas de las autoridades locales en dos jornadas consecutivas. Según informó Defensa Civil, el fuego había sido controlado el día anterior tras un operativo conjunto entre su personal y la brigada ciclista de la Policía de Tucumán, quienes utilizaron herramientas manuales para sofocar los focos activos.
Sin embargo, el 20 de diciembre, los focos se reactivaron, lo que obligó a una nueva intervención. Esta vez, la Brigada Forestal de Defensa Civil acudió al lugar con una autobomba forestal, una camioneta de logística y cuatro brigadistas. Las altas temperaturas, sumadas al volumen de material combustible —restos vegetales provenientes de la renovación de plantaciones de cítricos—, dificultaron el trabajo y generaron una densa columna de humo que afectó a los vecinos de barrios abiertos y cerrados de la zona.
La zona afectada se encuentra en un área buffer protegida por la Ley de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de Tucumán (OTBNT), clasificada en nivel rojo, lo que prohíbe su explotación agrícola.
Finalmente, el incendio fue controlado y se estableció una guardia de cenizas para evitar nuevos rebrotes. Las autoridades instan a los productores y habitantes a extremar las medidas de prevención para evitar situaciones similares.