La Universidad Nacional de Tucumán (UNT) enfrenta un escándalo tras la denuncia de una presunta venta de notas en la sede Aguilares de su Escuela de Enfermería, dependiente de la Facultad de Medicina.
La denuncia fue presentada por el docente Luis Solórzano, quien señaló irregularidades en la calificación de un examen parcial, sugiriendo una posible adulteración de notas. El caso involucra al jefe de trabajos prácticos de su cátedra, quien habría solicitado entre 30.000 y 40.000 pesos a los alumnos.
El decano de la Facultad de Medicina, Mateo Martínez, informó que el Consejo Directivo de la Facultad solicitó un sumario administrativo. “El proceso se realizará con rapidez y transparencia para verificar los hechos y asignar responsabilidades específicas”, afirmó Martínez.
La investigación, ahora en manos de la Dirección de Asuntos Jurídicos de la UNT, buscará aclarar las circunstancias y evitar que quede una sombra de duda sobre la institución. Augusto González Navarro, tiular del área, garantizó que el sumario tendrá la máxima velocidad debido a los intereses académicos afectados.
El caso también llamó la atención de la Justicia Federal. La Fiscalía Federal Nº2, a cargo de Agustín Chit, comenzó a investigar, tomando declaraciones a estudiantes y docentes. Además, la Fiscalía solicitó información a la UNT y la Dirección de Asuntos Jurídicos.
Martínez aclaró que en la denuncia no figuran indicios de pagos de favores sexuales o económicos, como se había sugerido a través de los medios.