Tras un año de intensas negociaciones, empresas citrícolas argentinas, incluidas varias de Tucumán, lograron extender un acuerdo con el Departamento de Comercio de Estados Unidos que promete mitigar la crisis de la industria.
El convenio, firmado el 17 de enero antes de la asunción del presidente Donald Trump, prorroga la suspensión de investigaciones por derechos antidumping sobre el jugo de limón argentino, vigente desde 2007.
Nuevo escenario comercial y ajustes de precios
El acuerdo incluyó una revisión de precios para diversas categorías de jugos de limón. El valor del galón de la categoría estándar, 400 GPL (grado de concentración), experimentó una baja del 15%, pasando de U$S12,48 a U$S10,50 FOB.
Esto implica que el precio por tonelada en el mercado spot cayó de U$S2.760 a aproximadamente U$S2.200.
“El acuerdo beneficia a la actividad citrícola y nos permitirá cumplir con los compromisos asumidos en el mercado estadounidense”, señaló José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus).
Además, se estableció un mecanismo para ajustar precios en caso de variaciones superiores al 10%, lo que garantiza mayor flexibilidad en futuros escenarios comerciales.
El sector citrícola tucumano, que representa el 80% de la producción nacional de limón, ha atravesado desafíos significativos en los últimos años. La pérdida de hectáreas de cultivo, la baja en los precios globales y el aumento de la competencia de países como Brasil y Sudáfrica han impactado en las exportaciones.
En 2024, Tucumán exportó más de U$S89 millones en cítricos y cerca de U$S100 millones en jugos, con el jugo de limón como principal producto.
Sin embargo, las ventas hacia la Unión Europea cayeron de entre 100.000 y 120.000 toneladas anuales a solo 35.000 toneladas, mientras que las exportaciones a Estados Unidos aumentaron a 94.000 toneladas.
Historia de un litigio
El conflicto con EE.UU. comenzó en 2006 con una investigación antidumping contra empresas tucumanas acusadas de vender por debajo de los costos de producción.
En 2007, se acordó suspender la aplicación de derechos definitivos mediante un precio de referencia para las importaciones, lo que permitió a los productores argentinos seguir accediendo al mercado estadounidense.
El nuevo acuerdo de 2024 reafirma este compromiso y amplía las condiciones comerciales, con 15 empresas argentinas firmantes, entre ellas San Miguel, Citromax, Citrusvil, Vicente Trapani y Pablo Padilla. Este respaldo colectivo fue clave para validar el convenio y asegurar su implementación.
Proyecciones para el sector
El acuerdo no solo representa un alivio inmediato para la industria citrícola tucumana, sino que también plantea un marco de estabilidad para competir en el mercado global.
Con la posibilidad de ajustes de precios y un renovado acceso al mercado estadounidense, las empresas locales confían en poder superar la crisis y fortalecer su posición internacional.
A pesar de los desafíos, el sector citrícola tucumano apuesta por aprovechar esta oportunidad para consolidar su liderazgo en la producción de limón y derivados, contribuyendo al desarrollo económico de la provincia y del país.
