Cuando un manto de calma parecía haber llegado a Boca tras hilvanar dos triunfos al hilo y romper la racha de visitante, una mala noticia de último momento hizo que se encendieran las alarmas del predio de Ezeiza: Miguel Merentiel se desgarró el sóleo y su presencia en la semifinal de la Copa Argentina ante Vélez será una incógnita hasta el final.
En plena fecha FIFA y mientras Fernando Gago lleva a cabo una breve pretemporada para potenciar la parte física de sus dirigidos, la intensa modalidad de trabajo le jugó una mala pasada a la Bestia, quien acusó un tirón en el sóleo que puertas adentro temen que puedan tratarse de una nueva lesión.
Cabe recordar que a fines de octubre Merentiel padeció una distensión en el aductor que lo marginó del partido con Deportivo Riestra y Lanús, y recién retornó contra Godoy Cruz ingresando unos minutos desde el banco de suplentes. El último domingo, ante Sarmiento, volvió a la titularidad y, luego de un primer tiempo errático e incómodo, en el complemento sacó a relucir su mejor versión jugando de delantero -su hábitat natural- y le dio el triunfo a Boca.
¿Cuál es el temor de Gago? Que efectivamente se trate de una rotura fibrilar que le demande algunas semanas de recuperación y, entonces, no pueda decir presente en las semifinales de la Copa Argentina contra Vélez, el compromiso más importante que le queda a Boca en el año.
Todavía con sede a definir, el duelo por un lugar en la final del certamen más federal del país está confirmado para el miércoles 27 de noviembre, es decir, el delantero uruguayo de 28 años tendrá apenas 14 días para recuperarse.
Si bien primero habrá que ver que indican los resultados de los estudios en el sóleo, a esta hora en el seno del club indican que lo van a esperar hasta último momento de ser necesario para jugar ante Vélez. El motivo tiene que ver con la incidencia del goleador en el equipo y porque el entrenador entiende que es fundamental en su estructura.