Las devoluciones fueron el resultado de una “activa cooperación” entre los dos países y mostraron el compromiso de restaurar los objetos históricos y culturales a su lugar de origen, dijo el ministerio.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) dijo que los objetos databan de entre el 400 a.C. y el siglo XVI y que pertenecían a diversas culturas prehispánicas de las costas del Pacífico y el Atlántico, así como del Altiplano Central.
El Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una campaña llamada “Mi patrimonio no se vende”, destinada a devolver a México lo que llama piezas saqueadas.
El INAH denunció esta semana una subasta en París que incluía objetos mexicanos valorados en miles o decenas de miles de euros.
El mes pasado, la vecina Guatemala incautó unos 1.200 objetos mayas encontrados en la casa de dos ciudadanos estadounidenses como parte de sus investigaciones sobre delitos contra el patrimonio cultural.
Países Bajos devolvió este año a Panamá una colección de 343 cerámicas de la época prehispánica.
Los ministros de cultura de todo el mundo se han comprometido a redoblar los esfuerzos para devolver a los países de origen los objetos robados y comercializados ilegalmente. Muchos se encuentran en museos europeos o en colecciones privadas.