Con la llegada del verano y la suba de la temperatura en todo el país, la necesidad de refrescar la casa es primordial. La mayoría de los hogares que no cuentan con una buena circulación natural de aire compensan esta situación con un ventilador o un aire acondicionado, sin embargo ambas opciones consumen mucha luz.
Recientemente llegó al país una nueva tecnología que viene a reemplazar a los electrodomésticos que encarecen los pagos de los servicios y que alteran la estética del hogar con sus estructuras toscas. Con un bajo consumo y beneficios para el medio ambiente, el techo radiante es ideal para combatir el calor.
El techo radiante es una tecnología similar a la losa radiante que se usa para calefacción, pero en este caso, enfoca sus capacidades en enfriar el ambiente. Funciona mediante paneles en el techo que emiten frío a través de agua helada en circuitos cerrados. A diferencia de los sistemas tradicionales como el aire acondicionado, este no genera corrientes de aire, lo que lo convierte en una opción más silenciosa, además de ser más económica.
El techo radiante se suele instalar en un “falso techo” con materiales como cartón, yeso, madera o incluso lona estirada. El sistema es muy discreto y no afecta el diseño del espacio. Esto permite mantener la decoración de la casa sin alteraciones. Es importante destacar que su instalación puede sr cara y conlleva un pago inicial importante, pero a la larga se transforma en una inversión, que se puede ahorrar dinero usándolo.
Beneficios del techo radiante
Consumo energético reducido: al utilizar menos energía, el techo radiante permite reducir significativamente el costo de la electricidad.
Temperatura homogénea: el calor o el fresco se distribuyen de manera uniforme en todo el espacio, eliminando los puntos fríos o calientes.
Sin ruido: a diferencia de los ventiladores o aires acondicionados, el techo radiante es completamente silencioso, lo que mejora el confort de los usuarios.
Sustentabilidad: este sistema puede funcionar con energías renovables, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono.